Receta de hígado encebollado

Ingredientes para 4 personas:

  • 750 gr de hígado
  • 3 cebollas
  • 3 cucharadas soperas de harina
  • 1/4 litro de aceite
  • 1 vaso de vino blanco
  • Pimienta
  • Sal

Preparación:

Procederemos a trocear el hígado en trozos gruesos. Para ello, desplazamos con cuidado la carne de la vesícula biliar, la separamos en partes y la cortamos con un cuchillo afilado. Una vez que hayamos obtenido los trozos deseados, los pasaremos por harina para que se impregne bien. A continuación, tomaremos una cebolla y la cortaremos en rodajas finas. La partiremos en cuatro trozos para que resulte más fácil de dorar en el aceite. Calentamos el aceite en una sartén y cuando esté caliente, añadiremos la cebolla. Cuando esté blanda, agregamos el hígado y sazonamos con sal y pimienta al gusto. Removemos con frecuencia para que se cocine bien por todas partes. Cuando el hígado esté en su punto, le agregaremos un buen chorro de vino y lo dejaremos cocer por unos tres minutos para que se mezclen los sabores. Después, ya estará listo para servir.

Valor nutricionales

El hígado es uno de los órganos más importantes del cuerpo humano, ya que desempeña una variedad de funciones vitales, incluida la asimilación de nutrientes. Su valor nutricional es innegable, ya que contiene una cantidad significativa de vitaminas, minerales y otros nutrientes esenciales.

El hígado es una excelente fuente de proteínas, que son necesarias para la construcción y reparación de tejidos. Contiene altos niveles de albúmina, una proteína de alto valor biológico, lo que significa que contiene todos los aminoácidos esenciales y es una excelente opción para aquellos que desean aumentar su ingesta de proteínas. Además, el hígado es una fuente rica de vitaminas A, B12, B6, B2, B1, C, E y K, además de numerosos minerales como el hierro, el zinc, el selenio, el cobre y el cromo. La mayoría de estos nutrientes son esenciales para el correcto funcionamiento del cuerpo humano. El hígado también es una buena fuente de ácidos grasos omega-3, que son importantes para un corazón saludable. Los ácidos grasos omega-3 ayudan a reducir el colesterol LDL (colesterol malo) y aumentar el colesterol HDL (colesterol bueno). Estos ácidos grasos también pueden ayudar a prevenir la aparición de enfermedades cardiovasculares y a reducir la inflamación en el cuerpo. Además, el hígado es una buena fuente de cobre, un mineral esencial para el correcto funcionamiento del sistema inmunológico. El cobre también es necesario para la producción de glóbulos rojos, lo que contribuye a la salud óptima.

Finalmente, el hígado también es una excelente fuente de folatos. Los folatos son una forma especial de vitamina B que se encuentra en alimentos como el hígado. Los folatos son importantes para la salud fetal y para prevenir la anemia. En conclusión, el hígado es un alimento con una gran cantidad de nutrientes y vitaminas esenciales para el cuerpo humano. Contiene proteínas, vitaminas y minerales, así como ácidos grasos omega-3, cobre y folatos, que son importantes para la salud y el bienestar general. Por lo tanto, si está buscando una forma de mejorar su salud nutricional, el hígado es un alimento ideal para agregar a su dieta.

Maridaje

El Vino Gallego se ha convertido en uno de mis favoritos para maridar con el hígado. El vino es un tesoro para la gastronomía gallega, ya que se trata de un vino de gran calidad y con una amplia variedad de sabores y aromas.
El Vino Gallego se elabora con una selección de las mejores cepas de la región que aportan una peculiaridad única a la bebida. Estas cepas son capaces de dar un vino que destaca por su complejidad, su elevada persistencia y su sabor intenso. Esta bebida se caracteriza por un color verde intenso, un aroma frutal con recuerdos a frutas tropicales y un sabor fresco con notas de flores blancas y cítricos.
Cuando se trata de maridar el Vino Gallego con el hígado encebollado, se recomienda elegir una variedad con una acidez media-alta, para equilibrar el sabor a grasa de la carne. El vino debe tener una buena estructura, así como una buena fruta para aportar una nota dulce y frutal que se equilibre con el amargor del hígado. Además, es importante elegir un vino con una buena acidez, para que el paladar no se quede saturado con el sabor a grasa. Algunos de los vinos gallegos más recomendados para acompañar el hígado son el Albariño, el Godello, el Loureiro y el Treixadura. Estos vinos tienen una acidez media-alta y una fruta intensa, además de una buena estructura para equilibrar el sabor a grasa del hígado. Además, estos vinos tienen una buena relación entre precio y calidad, por lo que resultan una excelente opción para maridar con el hígado. En conclusión, el Vino Gallego es una excelente opción para maridar con el hígado. Estos vinos cuentan con una gran variedad de cepas y sabores, y algunos de ellos destacan por su acidez media-alta, su fruta intensa y su buena estructura, lo que los hace ideales para equilibrar el sabor a grasa del hígado. Además, estos vinos tienen una buena relación entre precio y calidad.

Deja un comentario

Scroll al inicio